viernes, 16 de julio de 2010
Libre asociación de ideas: aparecidos
municipio del pimentón rodeado de milicos intermitentes, llanos ellos en su yoica agonía de ser los nadies que una vez lo fueron todo. Acorralados en la autopsia que los busca muertos y los matiene vivos. Marchando en fuerza bruta con inclemencia, cantando rectos los brazos al costado un himno, qué himno? el tuyo y el mio. Banderas rojas de sangre, manchadas por Rolando, cantadas por Aníbal; fue la lucha, tu vida, tu pluma, cien pies de fuego, doloso delito el que vienen a acapararse ellos. Escondidos en impunes titulares con clarinetes resonantes, quisquillosos, cosquilludos, mosaicos de la verdadera ignorancia y encima dicen querer la democracia. Cajón de manzanas en mi living, requechos de pulpito que no sabe administrar el futuro por querer adivinar el pasado. No te rias de mi risa que no me causa ya mas llanto, quiero verlos pelear por la patria de una vez por todas. Que suenen los timbres de las casas, esta vez para poner guirnaldas. No desaparecieron, estan en nuestras almas. Se llevaron años de lucha, ahora le devolvemos el grito en el cielo, una ley de medios y un sinfin de manos arriba que claman cambiar los colores de estas ramas que aturdidas por la guerra quedaron rancias y sepias. Aparezcan ahora que ya no hay circo, el pasto crecido pero sin rancho al olvido. Vengan que somos tierra sin escarabajos de oro ni panchos ni coca. Roca ahora es Boedo, Vilma Palma un ratonero, tangos mochos todavia quedan, el Bauen, el rojas y los titiriteros.
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Si los dichos se añejaron, la costumbre siente culpa por dejarlos en esos estantes, justo al lado de la tele, pero la verdadera culpa siempre la paga el que no se entera. El que llora aprende fuerte, a veces mucho mas porque igual no mama, pero atención desconocidos y próximos pasajeros! Si se pone el pecho uno se acuerda de existir! Que la patria no te demande no significa que las ideas de otros no lo hagan. Si faltan despertadores, tomemos cualquier colectivo, las iremos a buscar, no hay mentira mas grande que el miedo a viajar solo (es que en realidad solo es el que no canta para otros).
ResponderEliminarEra hora de que el mate cambiara la yerba, sino, no podría desmitificar mientras ceba unos amargos. Por cierto, ya no es mas patria o muerte, es amor o muerte.
Saludos cordiales, se nota que el agua estará en su punto exacto.
http://mordiendopalabras.blogspot.com/